En muchas series infantiles se inculcan valores sexistas. donde ELLOS son la norma y ELLAS la excepción o el complemento de ellos.

Sin embargo, existen diferentes fórmulas para identificar este sexismo normalizado.

Una primera fórmula es preguntarnos si la serie en cuestión transmite mensajes distintos y desiguales para niñas y para niños:

¿Quién es protagonista?
¿Quién está en un lugar secundario y complementario?
¿Ellas tienen como función ser el interés sexual o amoroso de los protagonistas masculinos?
¿A ella se la valora en función de su atractivo sexual?

Hemos crecido viendo series con mensajes sexistas.

Muchas familias pueden pensar: ¿Cómo va a generar desigualdad una historia infantil? Pues sí, las películas infantiles, los juguetes o los cuentos, transmiten estereotipos de género y contribuyen a reforzar desigualdades.

Si queremos frenar la cadena de transmisión de desigualdades de género y conseguir a que la infancia crezca con referentes diversos haciendo todo tipo de actividades, sin ninguna limitación por razones de género, es importante saber identificar el sexismo. Y lo podemos hacer a través de una actividad divertida como es el “Principio de Pitufina”.

El concepto procede de un ensayo escrito por Katha Pollitt para el New York Times Magazine en el año 1991 y posteriormente fue abordado por la comunicadora Anita Sarkeesian.

¿Cómo funciona?

Se trata de ver si en una serie o cuento los personajes masculinos son valorados por sus acciones o profesión y si solamente aparece un personaje femenino que es el objeto de deseo o el complemento de los protagonistas masculinos.

Existen muchas series que cumplen con el Principio de Pitfufina como “La patrulla canina”, “Doraemon”, “Pulseres vermelles”, o “Los Avengers”.

Aunque cada vez más encontramos series que rompen con este Principio como “Supe monsters”, “LEGO Elves: Secretos de Elvendale”, “Anfibilandia” o “Carmen Sandiego”.